TOXINA BOTULÍNICA

El paciente idóneo para este tipo de tratamiento médico-estético, es aquella persona ideal es aquel que desee mejorar sus arrigas de expresión superficiales. Esta técnica médico estética tiene como finalidad suavizar y relajar las arrugas que aparecen en el tercio superior del rostro (entrecejo, patas de gallo y frente), de tal forma que conseguiremos un rostro relaja y armonioso sin cambiar la expresión facial del paciente.

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El tratamiento de infiltración de Toxina Botulínica Tipo A se realiza en la consulta de forma ambulatoria y no requiere anestesia ya que es indoloro. Consiste en la infiltración del producto bajo la piel, de forma muy superficial, en el área donde existan arrugas faciales. El médico especialista elige la dosis correcta y los puntos de aplicación específicos para que las expresiones sigan siendo el reflejo natural de la propia personalidad.

Una vez finalizado el procedimiento médico de aplicación de Toxina Botulínica, no se observa un cambio inmediato, y el paciente podrá retomar sus hábitos cotidianos, sin preocuparse de presentar señales de haberse realizado algún tratamiento médico estético. Ocasionalmente, hay pacientes propensos a la formación de pequeño hematomas en el punto de inyección, los cuales se solucionan rápidamente.

Es aconsejable seguir una serie de recomendaciones después de haber realizado este tipo de tratamiento:

   - No frote o dé masajes en las áreas tratatadas durante las 24 horas siguientes al procedimeinto.

   - No se acueste ni haga ejercicio durante las 6 horas siguientes del tratamiento.

   - No se acerque la zona tratada a ninguna fuente de calor (exposición solar, calefacción, solarium, sauna etc...)

   - Durante las primeras 24 horas evite agachar la cabeza y eleve la misma a la hora de dormir con una almohada más.

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